Dubai ya es sabido que se está prodigando en añadir edificios singulares a su perfil. Le ha llegado el turno a la Maze Tower, un rascacielos que incorpora en su fachada el laberinto más grande del mundo.
Esto no pasaría de la anécdota si no fuera porque los responsables del proyecto contrataron a Ledscontrol, una empresa española para que instalara luces de LED en todos los balcones de apartamentos y oficinas, a lo alto de los 57 pisos de altura. De modo que a la puesta del sol, el edificio se transforma en todo un icono del skyline de la ciudad, y puede ser visto desde muy lejos.
Y para añadir más espectacularidad, la torre cuenta con más de 40 cabezas móviles que pueden proyectar un auténtico show de beams.
La incorporación de las luces, las posibilidades del mapping, la interacción con el ciudadano a través de pantallas digitales... son aún rendijas, pero nos facilitan una visión del futuro de las ciudades inteligentes que está cada vez más presente. Os dejamos un vídeo breve sobre lo que se puede hacer con la iluminación de la fachada.
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